Coliflor gratinada con bechamel: receta fácil

Receta ↓ Ángela Solar

Descubre esta deliciosa receta de coliflor gratinada con bechamel, una combinación perfecta de sabores suaves y cremosos. Con una textura delicada y un sabor irresistible, esta receta fácil de preparar te seducirá desde el primer bocado.

Ingredientes necesarios

Para preparar esta deliciosa coliflor gratinada con bechamel, necesitarás reunir todos estos ingredientes. ¡Te aseguro que merecerá la pena!

• Coliflor – Yo prefiero comprarla fresca, pero si estás apurado, también puedes usar coliflor congelada.
• Mantequilla – La mantequilla le da a la bechamel un sabor rico y cremoso. No dudes en usar una de buena calidad.
• Harina – La harina es esencial para espesar la salsa bechamel. Puedes usar harina de trigo normal o harina sin gluten si lo prefieres.
• Leche – Yo siempre utilizo leche entera para lograr una textura suave y cremosa en mi bechamel. Pero si quieres reducir las calorías, puedes usar leche desnatada.
• Sal – La sal realza los sabores de la coliflor y la bechamel. No te la saltes.
• Pimienta negra – La pimienta negra le da un toque de sabor adicional a la bechamel. ¡Prueba y verás la diferencia!
• Queso rallado – El queso rallado es clave para conseguir ese gratinado dorado y crujiente que tanto nos gusta. Puedes usar el queso que más te guste, pero yo recomiendo un queso rallado mezcla para gratinar.

Preparación de la coliflor: ¡el ingrediente estrella!

La coliflor es una de mis verduras favoritas, y siempre me recuerda a las comidas familiares de mi infancia. En este apartado, te explicaré cómo limpiarla, cortarla y cocerla para conseguir el punto perfecto y sacarle el máximo sabor.

1. Limpieza y corte: Lava la coliflor bajo el grifo y separa los ramilletes. Retira los trozos más duros del tallo y córtalos en trozos más pequeños. A continuación, corta la coliflor en floretes de tamaño similar para que se cocinen uniformemente. ¡Recuerda que un buen corte hará que tu coliflor gratinada sea aún más deliciosa!

2. Cocción: Hierve una olla grande con abundante agua y sal. Cuando el agua esté hirviendo, añade los floretes de coliflor y cocínalos durante 8-10 minutos, o hasta que estén tiernos pero aún crujientes. Para comprobar si están listos, pincha un florete con un tenedor. Si se clava fácilmente, la coliflor está lista. ¡Un consejo! No cocines la coliflor en exceso, ya que perderá su textura crujiente y se volverá pastosa.

Una vez cocida, escurre la coliflor y enfríala bajo el grifo con agua fría para detener la cocción y conservar su color. ¡Ya tienes la coliflor preparada para el siguiente paso!

Elaboración de la salsa bechamel: ¡el secreto de un gratinado perfecto!

Soy una gran fan de la salsa bechamel. Mi madre siempre la preparaba para acompañar las verduras y, desde entonces, ¡me encanta! En esta sección, te contaré cómo elaborar una bechamel cremosa y deliciosa para nuestra coliflor gratinada.

1. Para hacer una bechamel de calidad, necesitarás 50 g de mantequilla, 50 g de harina, 500 ml de leche y una pizca de sal y pimienta negra. Personalmente, prefiero usar leche entera para lograr una textura más suave y cremosa, ¡pero tú decides!

2. Comienza derritiendo la mantequilla en una sartén a fuego medio. Agrega la harina y remueve hasta obtener una mezcla homogénea. Ve incorporando la leche poco a poco, sin dejar de remover, hasta conseguir una salsa espesa y suave. Sazona con sal y pimienta negra al gusto. Recuerda, ¡paciencia es clave para una bechamel perfecta!

Un truco que aprendí con los años es calentar la leche antes de añadirla a la mezcla de mantequilla y harina. Esto ayuda a evitar la formación de grumos y facilita el proceso de elaboración. ¡Prueba y verás la diferencia!

Montaje y gratinado

Siempre me fascinó cómo una capa de queso dorada y crujiente podía transformar un plato sencillo en algo realmente especial. Ahora, te mostraré cómo crear tu propia magia con esta deliciosa coliflor gratinada con bechamel.

1. Empezaremos colocando una capa de coliflor cocida en el fondo de una fuente para horno. A continuación, cubrimos generosamente la coliflor con nuestra bechamel casera. Repite este proceso hasta agotar los ingredientes, terminando con una capa de bechamel en la parte superior.

2. Antes de hornear, espolvorea queso rallado por encima de la última capa de bechamel. Esto no solo le dará un sabor increíble, sino que también ayudará a lograr ese gratinado dorado y crujiente que tanto nos gusta. Hornea la coliflor gratinada en un horno precalentado a 200°C durante 20-25 minutos, o hasta que el queso esté dorado y burbujeante. ¡Disfruta de tu creación culinaria!